El Instituto CASO es una serie de programas y planes de estudio fundamentados en la adecuación curricular de los programas institucionales, con el objetivo de brindar las oportunidades y el ambiente idóneos para el aprendizaje y el desarrollo de las niñas, los niños y los jóvenes con capacidades y aptitudes sobresalientes, así como los casos de doble excepcionalidad.
Los programas del Instituto CASO contemplan cubrir los niveles de educación primaria hasta el bachillerato.
Nuestro modelo educativo
Nuestra filosofía educativa se funda en satisfacer las necesidades integrales de desarrollo de niñas, niños y jóvenes CASO. En un ambiente escolar tradicional esto es muy difícil de conseguir, dadas sus características.
El núcleo de aprendizajes esperados (la escuela tradicional)
En el sistema educativo vigente y empleado de manera tradicional, la totalidad de los recursos, las horas, el talento docente y la organización académica está volcado a desarrollar los aprendizajes esperados (contenidos de los programas operativos). Así, los alumnos pasan entre 5 y 8 horas al día recibiendo información en un método de dictado de cátedra, o bien, con otras metodologías de enseñanza y aprendizaje tediosas, autoritarias, poco estimulantes y a un mismo ritmo para todos.
Al final de un ciclo anual de 5-8 hrs diarias durante 10 meses, el alumno recibe una boleta o cartilla de calificaciones que sólo acreditan los conocimientos o aprendizajes nucleares, pero nunca se fomentó su desarrollo integral.
Por lo tanto, la escuela es como un edificio en el que todos están encerrados y con muy limitadas posibilidades de crecimiento y desarrollo integral.
Las escuelas dinámicas
Existe una variedad de escuelas que ponen un gran énfasis en el desarrollo integral y la estimulación de los alumnos, fomentando sus habilidades sociales, su gestión independiente y aumentan, por lo tanto, su sentimiento de autorrealización, al mismo tiempo que cubren lo mínimo indispensable que se les requiere del mundo burocrático para su avance y certificación escolar ante las instituciones educativas.
Este tipo de escuelas sería, figurativamente, una escuela que consiste en un edificio y un patio relativamente amplio. Es idóneo para el grueso de la población, porque potencia todas sus habilidades integrales.
Sin embargo, la población con capacidades y aptitudes sobresalientes (y más aún los que presentan doble excepcionalidad) aún en este tipo de ambiente pueden no encontrar las condiciones y situaciones idóneas para su desarrollo, sea intelectual o socioemocional.
La escuela aumentada
Las niñas, los niños y los adolescentes con altas capacidades se distinguen, entre otras cosas, por una curiosidad exacerbada, que puede semejar a una obsesión por ciertos temas, que frecuentemente son muy distintos a los temas que se abordan en sesiones de escuelas con programas y métodos educativos tradicionales.
Pero sus intereses, que brotan y crecen con inusitada rapidez, no sólo se apartan del plan trazado en los programas, sino de los intereses comunes de sus pares.
Por ello es indispensable generar un método y un plan que se adapte a los intereses del niño con altas capacidades, y no al revés.
La escuela aumentada consiste en un núcleo de aprendizajes esperados, que son abordados de modo expedito y eficaz con la intervención de docentes especializados, para que estos conocimientos sean certificados de manera oficial al ritmo que los alumnos y los docentes determinan, a lo que se suma una serie abierta y diversa de actividades que potencian el desarrollo intelectual, así como favorecen el desarrollo socioemocional de los alumnos.
Estas actividades son intra muros, como proyectos de investigación sobre temas de interés para los alumnos en lo colectivo y en lo particular, exposiciones, pláticas, creación y recreación artística, grupos de autoayuda, etc., y extra muros, como visitas a parques, deportivos, museos, otras escuelas, fábricas, institutos de investigación, y proyectos a desarrollar en casa, etc.
De esta manera, la escuela, es decir, la parte oficial y certificada de su formación, es sólo el pequeño núcleo que se certifica, cuyo “patio” no está limitado al predio del plantel, sino que es el mundo mismo, que, con la ayuda y orientación del personal calificado, se convierte en un enorme “patio” de posibilidades de crecimiento intelectual, social y emocional.
PROGRAMAS SEGÚN NIVEL/EDAD
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